
Nadia Comăneci es recordada como una gran gimnasta. De hecho, para mucha gente es la Mejor Gimnasta de la Historia. Y es que sin duda, marcó una época dentro del deporte, consiguiendo movimientos inéditos y ejercicios que cautivaban al público.
Pero si es recordada por algo, es por haber hecho historia en los Juegos Olímpicos. Fue en Montreal 1976, donde se convirtió en la Primera Gimnasta Artística con una Puntuación Perfecta en este evento multideportivo, aunque no en la historia del deporte como mucha gente piensa.
Era algo tan raro de lograr, que la organización indicó a Omega, proveedor de marcadores para esa edición, que en gimnasia eran suficientes 3 cifras, ya que nunca se habían superado los 9.95 puntos.
Se equivocaron tanto que durante aquellos Juegos Olímpicos se consiguieron hasta 9 resultados de 10 puntos. Tuvieron que representarlos con un «1.00».
Ya no hay ningún 10 en este deporte, y después de contarte la vida de Nadia Comăneci, también te explicaremos por qué y qué gimnasta alcanzó esa nota antes que ella en otro evento internacional.
Contenido de este artículo
- Nadia Comăneci. Biografía de una Niña demasiado Enérgica
- Juegos Olímpicos Montreal 1976
- Tiempos Duros para Nadia Comăneci
- El Adiós de Nadia Comăneci a la Gimnasia y Rumanía
- Una Nueva Vida
- Hitos en la Carrera de Nadia Comăneci
- El Diez Perfecto en Gimnasia. ¿Cuántos ha habido?
- ¿Por qué ya no hay Dieces de Gimnasia en Juegos Olímpicos?
Nadia Comăneci. Biografía de una Niña demasiado Enérgica
Nadia Elena Comăneci nació el 12 de noviembre de 1961 en Onești, una pequeña localidad rumana en las montañas de los Cárpatos.
Ya en su más tierna infancia era tan activa que su madre decidió apuntarla al equipo de gimnasia de la ciudad para que descargase tanta energía como derrochaba.
Con 6 años fue descubierta por Béla Károlyi, que buscaba jóvenes promesas para su nueva escuela de gimnasia experimental. En un año, Nadia ya se había convertido en una de las alumnas más aventajadas y en la gimnasta más joven en ganar los nacionales rumanos.
Su primera competición internacional llegó en 1971, durante un encuentro junior entre Rumanía y Yugoslavia. Ganó el All-Around y contribuyó a la victoria por equipos. Los siguientes años siguieron cargados de éxitos como junior.
Pero su primer gran momento llegó durante el Campeonato Europeo de Gimnasia Artística Skien 1975, celebrado en Noruega. Ganó todas las disciplinas, excepto Suelo, donde quedó segunda.
No obstante, en el preolímpico sólo consiguió imponerse en Barra de Equilibrio y All-Around. En el resto de pruebas la soviética Nellie Kim, su máxima rival, se alzó con la victoria.
Juegos Olímpicos Montreal 1976

Comăneci llegó a Canadá con un bagaje de buenos resultados. Sin embargo, nunca sospechó que se convertiría en historia de los Juegos Olímpicos.
El 18 de julio de aquel año se inició la competición All-Around por Equipos de Gimnasia Artística Femenina. Todo transcurría con normalidad hasta que una niña rumana de apenas 14 años terminó su ejercicio de Barras Asimétricas durante la rutina obligatoria.
Tras esperar la puntuación, en el marcador apareció «1.00». Nadie entendía qué significaba aquello, hubo cierta confusión tanto entre competidoras como entre el público. Finalmente, un juez anunció que se trataba de un 10, la Primera Puntuación Perfecta de Gimnasia Artística Femenina en unos Juegos Olímpicos.
Aquel no fue el único 10 del concurso. Comăneci sumó otras 6 puntuaciones perfectas más, todas ellas en Barra de Equilibrio y Asimétricas.
Tampoco fue la única gimnasta que alcanzó el 10. Nellie Kim también lo consiguió en Salto durante la competición All-Around Individual y en la final de Suelo.
Nadia Comăneci abandonó Canadá llevándose a casa 3 Medallas de Oro, 1 de Plata y 1 de Bronce, quedando fuera del Podio sólo en Salto.
Tiempos Duros para Nadia Comăneci
Tras el Campeonato Europeo de 1977, la Federación Rumana de Gimnasia trasladó a Comăneci a Bucarest, que tuvo que abandonar a su entrenador de toda la vida.
Esto coincidió en el tiempo con los cambios físicos propios de su edad y los resultados empezaron a resentirse. Estaba tan desilusionada que llegó a intentar suicidarse, aunque sin consecuencias graves posteriores.
En el Campeonato Mundial de 1978 comenzó a recuperar buenas sensaciones y, a pesar de quedar fuera del Podio en Barras Asimétricas, logró el triunfo en Barra de Equilibrio.
Después de aquel torneo, Comăneci pudo regresar a su ciudad para seguir entrenando con Károlyi y, al año siguiente, se convirtió en la Primera Persona que conseguía 3 Campeonatos Europeos consecutivos en All-Around Individual.
Rumanía acudió a Moscú 1980, a pesar del boicot organizado por distintos países, entre ellos, Estados Unidos. Nadia Comăneci ganó 2 Medallas de Oro y otras 2 de Plata.
Durante uno de los ejercicios, a Béla Károlyi la puntuación le pareció injusta y sus protestas fueron captadas por la televisión. El gobierno rumano consideró aquel comportamiento humillante y tuvo consecuencias para el entrenador.
Así que en 1981, tras finalizar una gira por Estados Unidos, denominada «Nadia ’81», Károlyi decidió desertar y quedarse en el país americano. Intentó convencer a la gimnasta para que también lo hiciese, pero ella prefirió volver a casa.
La vida de Comăneci cambió drásticamente. El gobierno la consideraba un activo nacional y temía que acabase siguiendo los pasos de su antiguo entrenador. Como consecuencia, la sometieron a una estrecha vigilancia, impidiéndole incluso viajar fuera de Rumanía, salvo a otros países comunistas como la Unión Soviética o Cuba.
El Adiós de Nadia Comăneci a la Gimnasia y Rumanía

Aunque su última competición oficial había sido la Universiada de 1981, el retiro de Nadia no fue oficial hasta 1984. Fue en una ceremonia organizada en Bucarest donde el Presidente del COI, Juan Antonio Samaranch, le otorgó la Orden Olímpica, el más alto galardón concedido por el Movimiento Olímpico.
Aunque ya no estaba en activo, formó parte de la delegación rumana en Los Ángeles 1984, donde acudió como observadora de la competición de gimnasia. A pesar de que su antiguo entrenador participó con el equipo local, no pudo hablar con él en ningún momento, puesto que la vigilaban para evitar que hablasen.
De regreso a Rumanía, las cosas fueron cada vez peor hasta que en 1989 decidió abandonar el país.
Tuvo que hacerlo de manera clandestina junto con otro grupo de disidentes. Viajaron durante las noches para no ser sorprendidos y cruzaron a pie Hungría y Austria, hasta que por fin pudieron tomar un avión a Estados Unidos.
Una Nueva Vida
En 1991 se mudó a Oklahoma donde vivía con la familia de Paul Ziert, que luego se convirtió en su manager. Además, empezó a colaborar con Bart Conner en su escuela de gimnasia y posteriormente iniciaron una relación sentimental.
Cinco años más tarde regresó a Rumanía, donde el gobierno de Nicolae Ceaușescu había sido derrocado sólo unas semanas después de la huida de Comăneci, y se casó en Bucarest con Conner, que a día de hoy sigue siendo su marido.
Fue recibida como toda una heroína nacional y su boda fue incluso televisada en directo para todo el país. A pesar de todo, regresó a Estados Unidos donde consiguió la nacionalidad en 2006 y sigue implicada con la gimnasia en distintos aspectos.
Hitos en la Carrera de Nadia Comăneci
- 1975: 4 Medallas de Oro y 1 de Plata en el Europeo de Skien.
- 1976: 3 Medallas de Oro, 1 de Plata y 1 de Bronce en Montreal 1976, donde sumó 7 puntuaciones perfectas, siendo la 1ª Gimnasta que alcanzaba el 10 en Juegos Olímpicos.
- 1977: 2 Medallas de Oro y 1 de Plata en el Europeo de Praga.
- 1978: 1 Medalla de Oro y 2 de Plata en el Mundial de Estrasburgo.
- 1979: 1 Medalla de Oro en el Mundial de Fort Worth.
- 1979: 3 Medallas de Oro y 1 de Bronce en el Europeo de Copenhague. Primera Gimnasta (hombre o mujer) que conseguía 3 Oros consecutivos en All-Around Individual.
- 1980: 2 Medallas de Oro y 2 de Plata en los Juegos Olímpicos Moscú 1980.
- 1981: Última competición oficial: Universiada de Bucarest, con 5 Oros.
- 1981: Su entrenador de toda la vida se queda en Estados Unidos, tras una gira por el país.
- 1984: Retirada oficial. El COI le otorga la Orden Olímpica por su carrera deportiva.
- 1989: Abandona Rumanía y se instala en Estados Unidos.
- 2004: Vuelve a recibir la Orden Olímpica.
El Diez Perfecto en Gimnasia. ¿Cuántos ha habido?
Todo el mundo guarda en la memoria la imagen de Nadia Comăneci como la Primera Gimnasta que logró un 10. Pero lo cierto es que fue la primera en alcanzarlo en unos Juegos Olímpicos.

Fuera de este evento, la Primera Gimnasta que logró una Puntuación Perfecta en un Campeonato Internacional, fue la checa Věra Čáslavská, en el Europeo de 1967.
Incluso la propia Nadia, antes de Montreal, había alcanzado esta puntuación en la American Cup.
Después de ellas, hubo otros muchos gimnastas (hombres y mujeres) que consiguieron puntuaciones de 10, la mayoría durante la década de los 80.
¿Por qué ya no hay Dieces de Gimnasia en Juegos Olímpicos?
Pues básicamente porque el sistema de puntuación FIG ha cambiado y ahora las notas que se logran son más altas.
En 1949 se estableció el primer sistema de puntuación de la gimnasia. Este partía de 10, para un ejercicio perfecto, y se iban restando los fallos y errores hasta alcanzar el resultado final.
Este método se mantuvo hasta 2006, cuando se decidió utilizar una nota compuesta por 2 valores para tratar de aportar más espectacularidad al deporte.
Actualmente se valoran por separado la dificultad y la impresión artística, cuyas notas se suman para obtener una puntuación final.
Dado que la dificultad de cada ejercicio es variable, ya no existe un valor que represente el ejercicio perfecto, a pesar de que técnicamente es posible conseguir un 10 en impresión artística.
Deja una respuesta